El limón es una fruta muy famosa, de sabor ácido y con una fragancia sumamente peculiar.
Sus características son aprovechables en muchos rubros, para elaborar postres, bebidas, salsas, condimentos, fragancias aromáticas. Además, es atemporal, por eso lo encontramos todo el año.
Todo el mundo lo conoce, lo usa y tiene un relación amigable con esta fruta de color amarillo, tambien sabemos que se instalaron de forma progresiva y desde hace mucho tiempo varios mitos sobre él, volviéndose una pocima mágica para el imaginario colectivo.
A quien no le recomendaron limón para la digestión de alimentos, para usarlo como “detox” o para sentirse mejor…. ¿Esto será así?
Revisemos las creencias más populares y veamos que hay de verdad en ellas.
○ El limón en ayunas es adelgazante. Mito.
Este mito es el que más incita a su uso. El limón no tiene propiedades quemagrasas, la realidad es que solo le añade sabor al agua. Si aumentamos la ingesta de agua y reemplazamos bebidas azucaradas por agua con sabor de la fruta natural, ayudará junto con una dieta equilibrada al descenso de peso, pero lejos está de ser por el limón.
○ Es rico en vitamina C. Verdad.
El limón es una fruta cítrica muy rica en vitamina C,A y minerales como todas las frutas. Sin embargo, un poco de jugo de limón no suplementa la cantidad de vitaminas necesarias, aporta aproximadamente 35 mg de vitamina C, solo una tercera parte de la dosis diaria recomendada.
○ Elimina toxinas. Mito.
Una leyenda muy extendida, personas que hacen dietas detox con limón esperando resultados milagrosos. La realidad es que no hay evidencia científica que lo demuestre. Ningún alimento tiene la propiedad de depurar el organismo, de hecho, son los riñones y el hígado los principales encargados de esto.
○ El ácido del limón puede ser nocivo. Verdadero.
Su característica ácida, utilizada como ventaja en ciertas recetas de cocina, da un impacto directo en los dientes, desgasta su esmalte, esto contribuye a la aparición caries, alteración del color y la sensibilidad, por esto l@s odontólog@s no son muy amig@s. Este ácido también irrita la mucosa del estómago, exacerbando úlceras o aumentando la acidez y el ardor.
El impacto del jugo de limón directo no es la panacea. El agua saborizada con limón natural es rica, en verano, nuestra aliada para los tereres. Si te gusta el sabor, disfrutá de ella, pero no esperes que tenga efectos milagrosos, ni que sea capaz de reemplazar la alimentación sana y variada.
