A pocos días de las fiestas de fin de año abundan los encuentros, los festejos y los merecidos brindis. Es muy común en estos contextos festivos, dejar de lado los hábitos saludables que se mantienen desde hace rato, nos relajamos más y solemos comer alimentos en exceso.

Se sabe que los alimentos navideños tienen una densidad calórica que no va de la mano con la temperatura de nuestro hemisferio y se suma a la lista una cantidad importante de alcohol.
Todo esto trae sobre esfuerzo del aparato digestivo, sensación de pesadez, acidez, flatulencias e hinchazón abdominal. Para evitar estas complicaciones, dejamos algunos consejos que pueden ser útiles.

Pensar un menú equilibrado, que incluya variedades de alimentos, poniendo atención a los vegetales, que estos acompañen y abunden en nuestros platos. Son buenos aliados para las altas temperaturas.

No alarguemos los dias de fiestas más de lo necesario, empezar a relajarnos días previos y tener comida de sobra por varios días más, hace que los días de exceso sean más del doble. Lo mejor es preparar cantidades adecuadas para ese día y evitar que quede cantidad.

Abundancia en líquidos frescos, optar por agua saborizada con jugo de limón natural y menta, puede ser un buen reemplazo a bebidas azucaradas. Estar hidratad@s ayuda a la saciedad y a evitar un posible dolor de cabeza o golpe de calor. Un vaso previo a comer, nos hará comer con menos ansiedad.

○ Evitar la sal para comensales hipertensos, además, moderar el consumo de alcohol alcohol y tratar de solo aprovecharlo para el brindis y no para saciar la sed.

○ Las frutas, muy nobles para la mesa dulce, ideales para el calor y para evitar picotear por todos los postres. Abundantes y con muchos colores, nos darán más energías para disfrutar de los festejos.

Presentar el plato ya servido, a fin de evitar las fuentes en las mesas, y poder ser conscientes de la porción que comemos. Elecciones más saludables y disfrutar sin ansiedad de nuestra comida preferida.

○ Evitar las frituras, hay muchas recetas a mano livianas y variadas, veggie o con carnes magras, sencillas y fáciles de hacer. Armar el menú con antelación, nos sacará de elegir por apuro métodos de cocción menos saludables.

○ Por último, tratar de llegar saciad@s a la cena, no tomar medidas desesperadas ni saltearse las comidas del día, lo único que se logra es llegar con un hambre voraz a la noche.

Recuerda que son fechas festivas, que merecemos disfrutar y compartir con la gente que nos acompaña, la comida no debería ser el foco de atención.

¡Felices fiestas!