El uso de la bicicleta fortalece a la persona física y mentalmente. Sin duda, andar en bicicleta nos dota de una mejor salud física general y sirve para liberar muchas tensiones y preocupaciones del día a día.
El pedaleo quema calorías y es beneficioso para el corazón. Con una hora de bicicleta a un ritmo no demasiado exigente se queman cerca de 500 calorías. Es una de las mejores actividades para disminuir el colesterol, una de las primeras causas de enfermedad cardiovascular.
Tonifica los músculos de las piernas, como los cuádriceps o los isquiotibiales, refuerza las rodillas y previene lesiones en esta zona. Gracias a la bicicleta fortaleces la musculatura que ejerce de sujeción de la rodilla, y éstas no se ven tan castigadas como en otro tipo de actividad física ya que se trata de un deporte de bajo impacto.
Ayuda a disminuir estreñimiento y alivia la sensación de hinchazón después de comer. Esto es porque la actividad física reduce la cantidad de tiempo que el alimento permanece en el intestino grueso.
Mejora el sueño: Cuando tienes un estilo de vida sedentario, puede ser que tengas problemas para conciliar el sueño. Practicar ciclismo es una forma de recuperarte de los patrones de sueño irregulares y hará que el tiempo que tardas en dormirte se reduzca. El ciclismo se relaciona con la adquisición de energía a corto plazo. Si quieres dormir temprano, es recomendable que lo hagas muy tarde.
Por último, ayudamos a la preservación del medio ambiente. Menos emisiones contaminantes, mejora del medio ambiente, con todos los beneficios que ello conlleva.
Animate! Salí en bicicleta y acordate siempre de usar casco.